Jefe de la Udev Central: "Estamos revisando todas las desapariciones de los últimos 50 años"

Fuente: https://www.elmundo.es/espana/2021/07/14/60e88969fdddffc04e8b4686.html

Tomás González dirige a los mejores investigadores del país en su materia con el reposo que da la veteranía y la solvencia de quien está en disposición de radiografiar todos los ángulos de la Policía Nacional porque se formó en su matriz: la Policía Judicial.

Homicidios, secuestros, desapariciones, organizaciones criminales, delitos contra el patrimonio y la propiedad intelectual, consumo, medioambiente y dopaje nutren la gran matrioska que centrifuga los instintos más bajos del ser humano. El jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (Udev) Central los conoce bien.

Tomás González combate estas tinieblas con operaciones que han llamado la atención de policías de otros países y abona una convicción que busca anclar en la unidad: la cooperación.

La mente criminal, ¿siempre va por delante?

Algunas veces sí y otras no. En homicidios no pero en delitos contra propiedad intelectual, consumo o dopaje puede que sea así y en algunos casos tengamos que aprender de sus avances. Para luchar contra ella muchas veces tenemos que aprender de ella.

De sus 39 años en la Policía, ¿hay algún caso que todavía le conmueva hoy?

Todos tenemos un caso. El mío fue el de una violencia de género. Fue en mis primeros años y era una chica a la que su ex novio secuestró, violó, mató y la abandonó en Huesca, a 200 kilómetros de Terrasa. La roció con gasolina y le prendió fuego para dificultar su identificación. Lo recuerdo porque tuve que dar la noticia a los padres de que había aparecido el cadáver. Era hija única, los padres eran mayores, profesores, a punto de jubilarse. Verles llorar y preguntarme que qué iban a hacer en la vida a partir de ese momento me hundió y me dejó muy tocado. Recuperamos el cuerpo y sus padres la pudieron rezar.

¿Hay que tener entonces un punto de psicólogo?

Sí, pero con todas las víctimas de cualquier delito.

Atienden un amplio abanico delincuencial, ¿hay algún delito que destaque sobre el resto?

Las extorsiones, sin duda. Han aumentado mucho y tenemos varias modalidades, por lo que estamos especialmente vigilantes. Se están dando muchos casos de las conocidas como sextorsión, que se dan tras visitar páginas de citas. Tenemos un alto índice de esclarecimiento pero en muchos casos la víctima siente vergüenza y no denuncia. También miramos con preocupación la denominada extorsión chilena que consiste en una llamada desde prisiones de Chile a un teléfono de España. Dicen que han secuestrado a un hijo y amenazan con matarle si no ingresan el dinero que piden. Las personas se asustan. Se tiene que dar una serie de circunstancias que coincidan pero si hacen mil llamadas, puede ser que 15 veces den en el clavo y que algunas víctimas al final acaben pagando. Luego está la extorsión mexicana, que es más trabajada. Una pareja va de viaje de novios a Cancún, le quitan la cartera y el móvil, llaman a sus familias y dicen que les han secuestrado. No tienen dónde localizarles. Cuando denuncian aquí tenemos línea directa con la policía de México.

Usted es un firme defensor de la cooperación internacional entre las policías...

Es fundamental. La delincuencia evoluciona y lo hace fuera de nuestras fronteras. Hoy en día, el delincuente es trasnacional. Y pongo un ejemplo de por qué es esencial que nos comuniquemos y cooperemos. En la unidad de delitos contra el patrimonio han culminado muchos operativos, entre ellos la operación Belator. Eran clanes de familias rumanos muy bien jerarquizados que hurtaban y cometían robos con intimidación en España. Después, se llevaban todo a Rumanía, donde lo invertían. Hicimos un equipo conjunto con la policía rumana y se les intervinieron diez mansiones y más de 300 coches de gama alta aparte de numerosas joyas y dinero en efectivo. Con la acción conjunta se demostró que era una organización criminal. Si sólo se hubiera hecho con la parte española, al final sólo se les habría condenado por hurto.

Son el punto nacional de desaparecidos, ¿todavía hay muchas desapariciones sin resolver?

Estamos revisando todas las desapariciones de los últimos 50 años que están sin resolver. En muchos casos es porque la persona ha fallecido. En otros, sucede que la persona aparece pero la familia no va a quitar la denuncia. Se están revisando todas para ver en cuáles hay que centrarse. Una desaparición es igual que una muerte. Es igual de dramático. Que la familia no sepa dónde está esa persona hace que se hagan una serie de preguntas y esos por qué les destrozan. Nosotros estamos investigando perpetuamente. No nos olvidamos de ningún caso sea una desaparición o un delito de cualquier otra índole.

Su unidad también se ocupa del juego y de las apuestas. En España, ¿tenemos motivos para estar preocupados?

Hay gente que dice que el juego es la heroína del siglo XXI. Está definido así por muchos autores, políticos y personas del ámbito académico. Otro ejemplo. En la anterior Eurocopa se movieron 85.000 millones en apuestas. En esta aún no hay datos pero, sin querer vaticinar nada, va a tener un crecimiento exponencial seguro. En las apuestas cada vez se mueve más dinero, no tiene fronteras, hay muchos grupos organizados, muchos tipos de mafia que intenta controlarlas y redirigir los resultados para obtener beneficios de forma muy fácil.

¿Se ha reforzado la vigilancia en esta Eurocopa?

Antes y durante activamos un dispositivo especial. Se han monitorizado las apuestas para ver si hay indicios de manipulación y contamos con la colaboración de la Dirección General de Ordenación del juego del Ministerio de Consumo, de la Uefa y la Fifa. También tenemos relaciones con otras policías de Europa.

¿Se apuesta cada vez a edades más tempranas?

Hicimos operación de control de salones de juego. Hubo menores. En cuanto hay uno nos inquieta pero luchar contra ello desde el ámbito policial es imposible ya que lo único que podemos hacer es proponer para sanción al establecimiento. Al ser una infracción administrativa, la lucha debe comenzar en el ámbito de la familia y en el educativo.

Son referencia en recuperación de patrimonio histórico...

Estamos recuperando muchas obras históricas, procedentes en su mayoría de expolios, que estamos entregando a museos autonómicos y del Estado. Todas ellas tienen un valor incalculable. También somos una referencia mundial en esta materia, participado en la operación Harmakhis, donde se demostró que el ISIS se estaba financiando con el contrabando de obras de arte, procedentes de los países donde estaban asentados. Hemos tenido peticiones de muchas policías para instruirlos sobre el operativo policial. Incluso la Fundación George Clooney nos ha pedido colaboración.